En la actualidad, podemos consumir cualquier verdura, vegetal o fruta en cualquier época del año gracias a la tecnología.
No obstante, los recursos necesarios para producir esos alimentos fuera de su época del año encarecen, y bastante, su precio. Por ello, tomates, coliflores, brócolis, berenjenas o pimientos cuestan bastante más.
Además, en La Vida Ecológica reivindicamos el consumo de alimentos saludables, pero también los métodos naturales de sembrar y cosechar. No es lo mismo una verdura llena de químicos que otra ecológica y orgánica.
Además si se respetan además los tiempos naturales de su producción (o si tenemos acceso a módulos orgánicos de plasticultura), los beneficios naturales se potenciarán.
¿Por qué son malos los verduras fuera de temporada?
No es lo mismo consumir un tomate sembrado y cosechado en verano, como nos indica la naturaleza, que consumirlo en invierno. Esto tiene varios significados:
- Puede ser traído del extranjero, recorriendo en enormes distancias recorridas que influyen en su calidad y precio.
- Fue sembrado y cosechado en otra estación, por lo que sus nutrientes y vitaminas no serán los mismos.
- Fue sembrado en módulos de plasticultura convencionales y está lleno de químicos perjudiciales para el organismo.
En general, las verduras de temporada suelen ser mejor aprovechadas, pues se recogen al momento de madurarse o poco antes, lo que redunda en un mejor sabor y textura, más vitaminas, más nutrientes y más frescura.
Solo tenemos que conocer cuáles se dan en cada época del año e incluirlas en nuestra dieta.