La vida moderna ha revolucionado ampliamente nuestra alimentación. Desde los nuevos alimentos que producen hasta la forma en que estos se cocinan y consumen. Por ello, saber qué pautas seguir para una alimentación saludable es importante.
Los niveles de grasa, el azúcar refinado y los carbohidratos “inútiles” se han multiplicado en los productos que consumimos diariamente. Comemos mucha comida que nos aporta cero nutrientes.
Lejos de evolucionar y mejorar nuestra alimentación para gozar de mejor salud, se ha profundizado en males como la diabetes tipo II, ocasionada por una mala alimentación, con alto índices de azúcares y grasas.
A esto, debemos sumar los nuevos hábitos de los humanos en lo que respecta a nuestra actividad física, pues contamos con obligaciones que nos hacen pasar más tiempo del debido sin movernos.
Así, estamos demasiado ocupados trabajando frente a un ordenador o atendiendo clientes y no le damos su debida importancia al ejercicio o a una alimentación equilibrada.
Creemos que todos estos hechos no afecta a nuestra salud, pero la verdad es que esto no nos hace ningún bien. Si comemos mal, estaremos mal. Si comemos bien, estaremos bien.
Consejos imprescindibles para una alimentación saludable
Cierto es que todo lo anteriormente mencionado son obstáculos de cara a tener una alimentación sana. Entonces, ¿qué puedo hacer para llevar una alimentación saludable?
Lo primero es comer en nuestra propia casa o, en su defecto, ser nosotros los que nos hagamos nuestra propia comida. Para ello, nada mejor que nuestra selección de tuppers de cierre hermético, para conservar las propiedades de tu comida durante días.
De esta forma, evitaremos tentaciones o contratiempos innecesarios que nos hagan salirnos de la hoja de ruta que indica nuestra rutina.
Esto conllevará más trabajo, pero también mejorará nuestra salud y, por qué no decirlo, nuestra economía.
No obstante, nada de eso servirá si esa comida que preparamos no es saludable. Para ello, podemos llevar a cabo algunas pautas saludables para mejorar nuestra alimentación:
- Aumentar las raciones de vegetales (orgánicos, en la medida de lo posible, y de estación).
- No cocinar con margarinas o aceites.
- Sustituir los carbohidratos de cereal (trigo, maíz, centeno, etc.) por carbohidratos producidos por verduras (calabaza, patata, yuca, ocumo, ñame, batata, etc.).
- Comer frutas enteras.
- Añadir algunos frutos secos y semillas a nuestra dieta. Nos aportarán un alto grado de fibra, vitaminas y carbohidratos.
- Bebe mucha agua, aunque no en las comidas. Se recomienda no beber nada 20 minutos antes y después de comer. Con el líquido, se disuelven los jugos gástricos y no hacen su labor correctamente.
- Eliminar por completo los alimentos procesados.
- Si utilizas aceite para cocinar, que sea aceite de oliva virgen extra.
- Incluir algas marinas en nuestra dieta.
Después de aplicar todas estas pautas, estarás preparados para llevar a cabo una alimentación saludable. Ahora, el próximo paso, es mejorar tu actividad física diaria. Notarás los resultados.